La colombiana Claudia Buelvas Sarmiento vive hace seis años en España y sabe que en verano cuando camina por alguna de las calles madrileñas o se sube al metro la gente se vuelve para mirarle su figura y a ella no le incomoda, por el contrario tiene un truco para resaltarla: su ropa colombiana. “Los pantalones de allí están diseñados de manera que el cuerpo se ve más estilizado, los glúteos se ven más firmes, es decir nos hacen sentir y ver más femeninas”, asegura Claudia.
Pero no solo son los pantalones, visitamos varias tiendas de ropa colombiana en España para ver qué proponen para este verano y comprobamos que más que prendas cómodas, vaporosas y sueltas, que es lo que se busca en España para las altas temperaturas, lo que se ofrecen son diseños sugerentes, sensuales y muy pegados al cuerpo gracias a los materiales en que están confeccionados. Es decir prima la sensualidad sobre la comodidad. Este año lo que causa furor son los llamados petos, o monos cómo se le dice en España a este estilo de pantalones, que se caracterizan por cubrir parte del torso con talles más altos y con tirantes. Los hay largos, cortos, de diversos estilos y colores pero todos tienen la misma característica: se ciñen mucho al cuerpo por su alto contenido de licra, y de esta forma se resaltan las curvas.
“Otra de las prendas que se están vendiendo muy bien, este verano, son las blusas que vienen con fajas incorporadas, llamadas bodys, pues pasan desapercibidas ante los demás y ayudan a disimular los excesos de grasa en la cintura y la cadera” dice Esmeralda Acevedo la propietaria de la tienda Pekados en Madrid.
Ni edad, ni nacionalidad
Lizeth del Campo es una joven colombiana de 17 años que desde hace 5 años vive en Madrid y pese a su corta edad tiene claro que le gusta vestir solo ropa colombiana por que los diseños le permiten marcar la diferencia entre sus amigas y además porque se siente más sexy cuando la luce . “¿Cómo puedes ponerte una blusa tan sensual? Es lo que me preguntan mis amigas españolas cuando llevo mis modelitos colombianos. Yo sólo me rio de ver sus caras de asombro”, dice Lizeth. Esta joven sabe que para poder lucir bien la ropa colombiana debe tener buen cuerpo ya que aunque algunas prendas ayudan a mejorar la figura otras, por el contrario, exigen tener buenas curvas. “Si te pones una blusa que deja al descubierto parte de la espalda o que deja al aire libre la cintura lo ideal es que te sientas bien, y no que sientas que estas metida en una blusa unas cuantas tallas menos” concluye esta joven. Pero del asombro rápidamente las españolas han pasado a dejarse tentar por la moda sensual que llega del país caribeño.
Paloma Zaragoza es una de ellas. “Un fin de semana estábamos en la casa de Nubia, una compañera colombiana del trabajo, y nos invitaron a una fiesta, pero como no estaba entre mis planes no había llevado ropa para la ocasión. Nubia me insistió que me pusiera un pantalón y una camiseta de las que ella solía usar para salir de marcha y lo hice. Al comienzo me sentía rarísima pues no soy de llevar ropa tan ajustada al cuerpo y segundo me sentía incomoda por el escote de la blusa, pero a medida que pasaban las horas me gustaba como se me veía el cuerpo y me sentía más mirada. Así fue que empecé a frecuentar las tiendas de moda colombiana, dice Paloma entre risas y aclara que por ahora solo ha comprado esta ropa para salir de copas y no para el día a día, pues no le gusta ir tan sensual al trabajo”.
Diferencias en las formas
Claudia Buelvas reconoce que no compra ropa confeccionada en España, porque tenga quejas del diseño o de la calidad sino porque considera que los cuerpos de las mujeres son diferentes en un continente y otro. “Las españolas son más delgadas de espalda, pero tienen la cintura y la cadera bien marcadas, mientras que las latinas solemos tener espaldas más gruesas e incluso más pecho y eso ya hace que la ropa nos quede diferente a unas y otras” dice Claudia y Yolanda Martínez, otra clienta que está en la tienda de ropa colombiana añade “El motivo por el que vengo a comprar mis blusas aquí, es porque las que me ofrecen en los almacenes españoles me quedan estrechas de brazo cuando no son hechas en materiales elásticos. Yo suelo decir que las españolas tienen el cuerpo en forma de pera y las latinas de guitarra y ese detalle es clave a la hora de la confección pero no se tiene en cuenta”.
Detalles y caprichos
A la mujer colombiana le gusta ir conjuntada y se preocupa por las combinaciones de colores y por los pequeños detalles. Es así como de ese país están llegando las tiras de sujetador diseñadas en canutillos y pedrería para que se conviertan en un adorno más y no sea una simple tira elástica. En lo que respecta a los trajes de baño, este verano llegó del Caribe la moda del trikini, que es la mezcla entre un bikini y un vestido enterizo. Es decir que tiene el sujetador y las bragas unidas por una tira que cubre el ombligo. Sin embargo y pese a la variedad que se ofrece en el mercado español algunas colombianas se dan un caprichito comprando las marcas que han usado desde su país de origen.