Al preguntarles al azar a treinta colombianos que viven en España qué fue lo mejor que hizo Noemí Sanín cuando fue embajadora de Colombia en este país, veinticinco afirmaron que conseguir que el Gobierno español permitiera la homologación del carné de conducir. Sin embargo todos la condenaban por una información que salió en los medios de comunicación en la que quedaba al descubierto que mensualmente recibía más de quince mil euros de sueldo. “Es muy doloroso que cuando un colombiano pobre muere en España toque pedir limosna entre sus paisanos, yo me pregunto ¿qué embajador ha propuesto un fondo o una partida para este tipo de calamidades? pero ahora sí quieren nuestros votos” dijo uno de los encuestados que, como los demás, aceptó contestar las preguntas sin ser identificado.
Respecto a la intensión de participar en las elecciones presidenciales el próximo 30 de mayo el panorama no es muy alentador. De los treinta encuestados sólo doce tenían inscrito su documento de identidad para poder votar en Europa y de estos sólo cinco pensaban acercarse a las urnas. Este dato de abstención se hizo evidente el pasado 14 de marzo, cuando se llevaron a cabo las elecciones para el Congreso Colombiano y, de los 53.936 colombianos inscritos para votar en España, tan sólo lo hizo el 30%.
Votar por el país
Carmen Bermúdez presidenta de FEDEASCODE, Federación de Asociaciones de Colombianos en España, que tiene su sede en Barcelona, considera que la gente que vive en España cada vez vota menos porque ha dejado de creer en los políticos. Sin embargo ella permanentemente los anima a que participen en estos actos democráticos. “Yo no pertenezco a ningún partido político, y cuando voto lo hago por una persona no por un color y es a eso a lo que invito a los colombianos que están fuera del país, a que se acerquen a las urnas, pues ya no es como en otras épocas en las que solo los dos partidos tradicionales se disputaban la presidencia. Hay otras opciones y solo de nosotros depende que las cosas no sigan como hasta ahora” dice Carmen, quien se confiesa partidaria de que el voto sea obligatorio.
Esta dirigente social admira a la ex embajadora Sanín por ser una mujer inteligente y capaz, pero considera que ha desaprovechado las oportunidades que ha tenido para ayudar a la gente. Carmen cree que la candidata tiene capacidad suficiente para llevar las riendas de su país pero considera que sería más de lo mismo. La indiferencia es irresponsabilidad “Lo primero que debemos entender los inmigrantes es que por el hecho de salir del país no dejamos de ser colombianos, tenemos que seguir de cerca lo que pasa allí donde están nuestra familia, amigos y raíces y participar en la elección de sus dirigentes” dice Luis Alberto Alarcón, presidente de la Fundación Vida – Grupo Ecológico Verde que opera en Madrid-. “La indiferencia no gana sino que resta”. En esta frase Alarcón encierra parte de su pensamiento frente al tema de las elecciones. Este dirigente de las minorías étnicas colombianas critica cómo los inmigrantes colombianos son vistos por su Gobierno como piezas claves para generar divisas, para venderles servicios consulares y establecer con ellos relaciones netamente comerciales, pero aclara que actuar frente a esto con antipatía en las urnas es un acto de irresponsabilidad. “Solo con los votos se puede luchar contra la corrupción ya que es el único mecanismo que tenemos para que no gobiernen los mismos” puntualiza Luis Alberto.
Respecto a Noemí Sanín este hombre, que lleva 10 años al frente de su fundación, reconoce que siente un agradecimiento personal hacia la ex embajadora pues ella fue la primera en escuchar y atender su petición de tener un cuerpo diplomático colombiano en España multicultural y gracias a ello ha sido posible ver trabajando en el Consulado y en la Embajada a indígenas y negros.
Dar ejemplo democrático
Yolanda Martínez Díaz es una colombiana que lleva 10 años en España y siempre que ha habido elecciones bien para presidente, alcaldes, gobernadores o congresistas ha sufragado. “No podemos pretender que las cosas cambien con solo criticar, debemos hacer uso del derecho al voto que tenemos para poder lograrlo”, señala. Para enterarse de cuáles son los candidatos y cómo va la campaña, su primera fuente son los medios de comunicación de su país a través de Internet y luego su familia, para ella es importante saber qué piensan ellos, que viven allá, de los candidatos. Apunta: “Antes de tomar una decisión por quién votar me entero de sus propuestas de gobierno, es decir me gusta hacer una elección a consciencia”. Esta actitud responsable frente a la democracia se la inculcaron en casa. Su padre fue nombrado alcalde de su pueblo, El Tambo, al Sur del País, cuando aún no se hacía por elección popular. Pero una vez que la Ley cambio ella recuerda que su progenitor se presentó como candidato al concejo municipal y a la diputación de su departamento, y ganó. “Tengo una hija que nació en España hace cinco años y medio y ahora que ella ya entiende la llevaré el día de las elecciones pues quiero inculcarle con ejemplo, como lo hicieron mis padres, lo importante que es la democracia” dice esta ingeniera industrial.