Ocio Latino.- «De hecho, los migrantes podrían haber mitigado algunos de los impactos de la crisis al trabajar por sueldos más bajos, recibir menos beneficios y depender relativamente poco del Estado» afirmaron desde el Banco Mundial (BM) en un informe sobre la crisis financiera global.
Los inmigrantes mitigan así los efectos de la crisis en países desarrollados y a la vez influencian de forma positiva en sus países en desarrollo gracias al envío de remesas. «Durante la crisis, las remesas continuaron siendo fuente constante de divisa extranjera para economías en desarrollo en un momento en el que la ayuda internacional no se incrementa y la inversión extranjera directa decreció rápidamente».
Según el informe, el importe de estos envíos de dinero en el mundo se cifra en 399.000 millones de dólares para 2012, una cantidad superior a 2011.
«Contrariamente a lo que se esperaba, no encontramos evidencias del regreso de emigrantes, incluso después de que la crisis financiera redujera las oportunidades de empleo en Estados Unidos y Europa, con muchos países, como España, ofreciendo incentivos para el retorno de inmigrantes», señaló el BM.