Escribe: José Luis Salvatierra / Ocio Latino / Cientos de peruanos cansados de su Cónsul General del Perú en Madrid, Arturo Chipoco Cáceda, y de sus gestiones, volcaron los últimos días sus reclamaciones en Internet, las cuales se quedaron grabadas cargadas de indignación, pero tal vez se pierdan en el ciberespacio, pues hasta el momento no han encontrado un eco o apoyo en las asociaciones de peruanos de nombres reivindicativos que supuestamente defienden sus derechos, tampoco han encontrado apoyo en las representaciones de los partidos políticos peruanos, o en los que se proclaman líderes sociales del colectivo.
La gota que colmó la paciencia de la mayoría de ciudadanos peruanos, y que ocasionó las protestas, ha sido la organización de las Fiestas Patrias del Perú para 700 personas que el Cónsul organizó en Madrid y donde han tenido poca opción de participar cerca de 80 mil peruanos residentes en la capital. Aunque no todos hubieran asistido, reclaman haber tenido la opción de decidir y no se creen el vídeo que D. Arturo Chipoco se hizo grabar para proclamar que las entradas se agotaron muy rápido gracias al éxito de su evento.
Pero las quejas, que empezaron por la limitación del aforo, se extiende a reclamaciones para que no haya tratos preferentes, especialmente ahora que comprueban que nadie los representa pero que siempre tienen sillas aseguradas en estos actos.
Las críticas recogen la mala gestión en la entrega de estas invitaciones que se acabaron en tan poco tiempo y que los peruanos dudan de que se hayan distribuido abiertamente, tal como difundieron las autoridades en un comunicado, y donde ofrecían a los peruanos solicitar dichas invitaciones siempre y cuando cumplan una larga lista de requisitos.
Los peruanos se han sentido marginados por sus autoridades y con pena de no tener cabida en un evento oficial para celebrar al Perú. Pero nadie hizo caso a cientos de indignados peruanos, solo el community manager del consulado, que repetitivamente ha respondido a algunos ciudadanos en Internet: “Comprendemos su malestar, hemos hecho llegar su sugerencia a nuestro Cónsul General”.
¿Le habrán llegado las quejas al Cónsul?. Ocio Latino también escribió una queja directamente al email del Cónsul y por segunda vez no ha respondido.
Ayer, en la discutida Gala, el Cónsul prefirió no pronunciar un discurso propio y se limitó a leer el mensaje que Ollanta Humala envió a los peruanos que viven en el exterior, incluido el ¡Viva el Perú!, que ya venía escrito. No aportó nada de su cosecha. Nada de promesas ni logros. Nada de disculpas. Nada de las quejas de los indignados peruanos, que una vez finalizadas las Fiestas Patrias serán tal vez más ignoradas, más invisibles.
Al pie de este artículo publicamos algunas de esa quejas como constancia de los que sucedió el 28 de julio de 2015.
