Ocio Latino-. Younes Abouyaaqoub, el terrorista que conducía la furgoneta que atropelló a decenas de personas en La Rambla de Barcelona y que acabó con la vida de 13 personas, ha muerto abatido por los Mossos d’Esquadra en Subirats a 50 kilómetros de Barcelona. El terrorista, de 22 años, también mató en huida a un joven de Villafranca del Pendés al que apuñaló, convirtiéndolo en la víctima número 15 de los atentados.
Los agentes han dado el alto al supuesto terrorista, que mientras gritaba «Alá es grande» se ha abierto la camisa y ha mostrado un cinturón que parecía llevar cargas explosivas, por lo que los mossos le han disparado hasta darle muerte.
Posteriormente, los artificieros de los TEDAX de los Mossos d’Esquadra han comprobado que el cinturón no llevaba explosivos reales, como sucedió con los cinco miembros de la célula que fueron abatidos en el atentado de Cambrils (Tarragona).
El supuesto autor del atropello masivo de Barcelona había sido reconocido instantes antes, cerca de la estación de Renfe de Sant Sadurní, por un jefe y un subjefe de la comisaría de Mossos de Vilafranca del Penedès (Barcelona) que llegaban de una reunión en el edificio central de la policía catalana en Sabadell (Barcelona), y por una vecina con «amplios conocimientos en fisonomía» que ha llamado al teléfono de colaboración ciudadana.
Paralelamente, las pruebas de ADN practicadas a los restos mortales hallados en el chalé de Alcanar, donde los terroristas estuvieron preparando su golpe durante meses, han permitido confirmar que en la explosión falleció el imán de Ripoll (Girona), Abdelbaki Es Satty.