Sentencia contra el racismo y xenofobia.

La Sección 17 de la Audiencia Provincial de Madrid  determino la autoría de un delito de lesiones agravadas (art. 149º Código Penal),  en el acto causado por el ciudadano español Roberto Alonso, quien con un golpe de puño dejo tetrapléjico al inmigrante congoleño Miwa Buene, causándole la fractura de las vértebras cervicales C-4, C-5 y C-6.
La condena impone la pena de 10 años de prisión de los 12 que venía solicitando el Ministerio Fiscal, la Acusación Particular y la Popular personada en el Tribunal Superior de Justicia, con esta sentencia se sienta un precedente en los anales de la justicia europea dado que, se califica de lesiones agravadas el reprochable acto aplicando las agravantes de racismo y alevosía.
En la tramitación de la investigación policial y luego a instancia judicial se determino que la responsabilidad esta agravada debido a que la agresión (golpe de puño) estuvo acompañada con gritos xenófobos que el agresor esgrimía precisamente por ser de raza negra y emigrante, y cuando el ciudadano congoleño se retiraba del lugar y ya le había dado la espalda al agresor.
Los hechos comenzaron cuando el agresor (vecino de Alcalá de Henares), solicitó un cigarrillo a Miwa. Éste último al responder negativamente recibió insultos como:  «Vaya hijo de puta», «en este país no hay sitio para ti», entre otros términos similares, propinando a continuación un golpe en el cuello que le causó la tetraplejia, no dejando de levantar el brazo derecho en señal del antiguo saludo fascista.
La citada sentencia ha tenido como Magistrada ponente a Dª. Manuela Carmena, quien determinó que en el acto del agresor existió el dolo directo de causarle un mal y con este hecho se aceptaba el peligro o daño que pudiera causar la acción, situación prevista en la uniforme jurisprudencia del Tribunal Supremo, y por parte de la víctima estaríamos ante “una alevosía sorpresiva” ya que, la simple discusión por un cigarrillo no es previsible que termine con una lesión de su médula. Esta tesis tiene en contraposición al denominado dolo eventual que alude en su voto singular el Magistrado Ramiro Ventura quien solicita se imponga la sanción de sólo cinco años y medio de prisión dado que el agresor no pudo prever que el golpe le causaría el resultado lesivo: la tetraplejia.
Los miembros del tribunal también han sentenciado para que se indemnice a la víctima con un millón y medio de euros que seguramente el cumplimiento de dicho pago será una condicionante en la ejecución de la sentencia. Es importante señalar que esta singular condena es un claro mensaje desde el punto de vista preventivo general que persigue la ciencia del derecho penal contra todo ataque por razones de índole xenófoba o racista que pueda suscitarse en la convivencia multicultural.
Reprochamos este lamentable acto de violencia que ha sumido a Miwa Buene en la peor condena de su vida, que es  el hecho de verse postrado en una silla de ruedas de por vida. Hacemos votos para que la ciencia médica pueda algún día devolverle su locomoción corporal y disfrutar de su familia y buena salud, y esta sanción judicial signifique el reproche de la sociedad autóctona y la migrante a todo acto de violencia venga de donde venga, cause daño a cualquier persona, sea por daño a la vida o la integridad física de otro ser humano no autóctono, el agresor debe ser sancionado por la justicia como en el presente caso, es hora de seguir venciendo con ella los brotes de injusticia, es hora de seguir promoviendo sociedades donde se imponga no el violento sino el más justo y honesto, y las armas del mundo actual sigan siendo la tolerancia, la razón, la justicia en función del bienestar y la convivencia del hombre.
Una vez más, hay que reconocer la labor del Movimiento contra la Intolerancia por su labor en casos de esta naturaleza, entidad que tiene habilitado el teléfono 902.180.995 para las víctimas que denuncien agresiones de similares características «aunque no tengan papeles».

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