Ocio Latino-. Cerca de 3.000 personas se han agolpado este domingo a las puertas de Xanadú, un centro comercial de la localidad madrileña de Arroyomolinos, para optar a uno de los 500 regalos que el gigante asiático AliExpress daba en la apertura de su primera tienda física permanente en Europa. Aunque solo los 500 clientes más madrugadores de la multitudinaria cola tenían derecho a un presente, han sido cientos las personas que han desafiado el sol y el calor con el único aliciente de ser de los primeros en cruzar la primera puerta europea entre el mundo ‘online’ y el desconectado del comercio chino.
Una vez dentro, los clientes más dormidos han tenido la oportunidad de espabilarse con un café -cortesía de la casa, que cuenta en el interior de la tienda con AliExpresso, un puesto de café gratuito para los usuarios- antes de lanzarse a su primera experiencia física con el gigante del comercio electrónico.
Aunque más de uno se imaginaba la nueva tienda como un bazar chino abarrotado de baratijas y cachivaches electrónicos de toda clase, el nuevo AliExpress Plaza se asemeja más a una moderna galería, al estilo ‘Apple store’, que a un almacén asiático de ‘todo a un euro’. De hecho, los ‘stands’ principales de la tienda, distribuidos en amplias mesas dispuestas a lo largo de un corredor diáfano, están ocupados por escaparates minimalistas de teléfonos y tabletas de marcas como Huawei, Xiaomi, Samsung o la propia Apple, que cuenta con una ‘store’ a escasos metros de su nuevo competidor.