WASHINGTON.- Se prevé que los envíos de dinero que realizan los inmigrantes a nivel mundial mundial disminuyan bruscamente en aproximadamente un 20 por ciento en 2020 debido a la crisis económica inducida por la pandemia y el cierre de COVID-19, según las previsiones del Banco Mundial.
La caída proyectada, que sería la mayor caída en la historia reciente, se debe en gran medida a una caída en los salarios y el empleo de los trabajadores migrantes, que tienden a ser más vulnerables a la pérdida de empleo y salarios durante una crisis económica en un país de acogida. Se prevé que las remesas a los países de bajos y medianos ingresos disminuyan en casi un 20 por ciento, lo que representa una pérdida de una línea vital de financiación crucial para muchos hogares vulnerables.
Los estudios muestran que las remesas alivian la pobreza en los países de ingresos bajos y medios, mejoran los resultados nutricionales, se asocian con un mayor gasto en educación y reducen el trabajo infantil en los hogares desfavorecidos. Una caída en las remesas afecta la capacidad de las familias para gastar en estas áreas, ya que una mayor parte de sus finanzas se destinará a resolver la escasez de alimentos y las necesidades inmediatas de medios de vida.
Se espera que los flujos de remesas disminuyan en todas las regiones del Grupo del Banco Mundial, especialmente en Europa y Asia Central (27.5 por ciento), seguidas de África Subsahariana (23.1 por ciento), Asia del Sur (22.1 por ciento), Medio Oriente y África del Norte ( 19.6 por ciento), América Latina y el Caribe (19.3 por ciento) y Asia Oriental y el Pacífico (13 por ciento).
En 2021, el Banco Mundial estima que las remesas a los LMIC se recuperarán y aumentarán en un 5.6 por ciento. Las perspectivas para las remesas siguen siendo tan inciertas como el impacto de COVID-19 en las perspectivas de crecimiento global y en las medidas para frenar la propagación de la enfermedad. En el pasado, las remesas han sido anticíclicas, donde los trabajadores envían más dinero a sus hogares en tiempos de crisis y dificultades. Esta vez, sin embargo, la pandemia ha afectado a todos los países, creando incertidumbres adicionales./ Con información del Banco Mundial