Ocio Latino-. Durante la crisis del coronavirus ha habido varios casos en los que las autoridades no han sabido dar ejemplo sobre cómo se deben cumplir las medidas de seguridad para evitar los contagios por coronavirus. El último en protagonizar un incidente bastante bochornoso ha sido Juan Urbina Torres, el alcalde del distrito de Tantará, en la región de Huancavelica, en Perú.
Según informa el diario El Comercio, Urbina Torres decidió salir por la noche con unos amigos para beber con ellos. De esta manera, se saltó el toque de queda y el distanciamiento social requerido para hacer frente al coronavirus. El grupo se reunió en un almacén y pasado un rato se presentó la policía.
Fue entonces cuando el alcalde de la localidad decidió esconderse dentro de un ataúd. Se estiró boca arriba con una mascarilla puestay se quedó quieto. Varios de sus acompañantes hicieron lo mismo. Como era de esperar, esa improvisada distracción no sirvió y los policías se llevaron al alcalde y a sus amigos a la comisaría. En el momento de la detención, el alcalde se encontraba en estado de embriaguez.
Urbina Torres ha sido duramente criticado durante la crisis del coronavirus, ya que sus vecinos consideran que ha ignorado la gravedad de la situación. El pasado 9 de mayo tuvo que ir obligado a una reunión sobre el coronavirus y los habitantes de Tantará se quejan de que hasta el día 58 de la pandemia el alcalde solo había pasado ocho días en la localidad.