Siete expresidentes iberoamericanos del Grupo de Puebla han alertado este jueves de la «incertidumbre» y «confusión» generadas en Perú por el retraso en la proclamación del candidato de Perú Libre, Pedro Castillo, como presidente del país andino.
Los exmandatarios brasileños Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff, el colombiano Ernesto Samper, el ecuatoriano Rafael Correa, el panameño Martín Torrijos, el paraguayo Fernando Lugo y el español José Luis Rodríguez Zapatero, han firmado un escrito en el que han manifestado su «preocupación» por la situación política del país.
En el documento, que han asegurado se difunde «por la necesidad de defender la institucionalidad democrática, los expresidentes han señalado que «existen evidencias contundentes de que el profesor Pedro Castillo obtuvo la mayoría en las elecciones desarrolladas en consonancia con las garantías y normas de transparencia y competencia electoral llevadas a cabo el pasado 6 de junio».
«Escrutadas la totalidad de las actas de votación llamamos respetuosamente al Jurado Nacional de Elecciones (JNE) de Perú a proceder en consecuencia y declarar de manera formal la victoria de Pedro Castillo», han continuado, en referencia al retraso en la proclamación producido por la revisión en el ente electoral de las cientos de peticiones de nulidad de actas presentadas por la aspirante de Fuerza Popular, Keiko Fujimori.
En este sentido, los exmandatarios del Grupo de Puebla han indicado que «el legítimo derecho» del que disponen los «contradictores políticos» de Castillo para solicitar aclaraciones y revisiones de los documentos y procesos electorales, «no puede convertirse en una estrategia dilatoria para impedir la validación de resultados», ya que «según los conteos y las misiones de observación electoral internacional, son incuestionables».
«Como es de conocimiento del presidente de la República (Francisco Sagasti), de las Fuerzas Armadas y demás actores institucionales, cualquier retraso injustificado en la oficialización de la decisión adoptada por el pueblo peruano y que resultó en la elección de Pedro Castillo, genera incertidumbres y espacios de confusión indeseables», han agregado.
Esto, como han aseverado, afectará «al curso de la economía y la estabilidad de la democracia», así como «puede retrasar ilegítimamente el mandato del presidente electo Castillo afectando la concreción de los proyectos sociales anunciados durante su campaña».
Perú está a la espera de conocer su próximo presidente, después de la disputada segunda vuelta del pasado 6 de junio, que dejó a al izquierdista Castillo, candidato de Perú Libre, con el 50,12 por ciento de los votos, por delante de la opción ultra conservadora que representa Fujimori, quien con el 49,87 por ciento de las papeletas ha pedido nulidades de actas.
Actualmente, estas están bajo revisión en el JNE, que ha empezado ya a declararlas infundadas, mientras la aspirante de Fuerza Popular ha iniciado una campaña judicial para intentar revertir la situación. Por su parte, misiones diplomáticas de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) o la Unión Europea (UE), entre otros, han descartado irregularidades.
