“Esta canción nace porque estaba tan frustrado al ver la turbulenta situación causada por las protestas en Colombia durante mayo 2021 en redes sociales. Las personas amenazando con quemar a policías, los policías disparando a los jóvenes protestando en las calles. Fue un momento surreal de caos en mi país y comencé a escribir sobre el horror y el dolor que estaba viviendo. Tiene esa vibra de Pink Floyd con el primer verso contando lo que pasó, y luego el coro diciendo, ‘no somos iguales’. El segundo verso es más optimista, dice que lo único que tenemos que hacer es cambiar. Para el video dirigido por María Camila Calle, recordé otra historia real sobre las protestas que realmente me impresionó – cuando una ambulancia que transportaba a una mujer embarazada estaba rodeada y bloqueada por las personas protestando. Como resultado, el bebé murió antes de que llegaran al hospital, y esto ocurrió dos veces durante las protestas de mayo. Pensé que estas nuevas almas las cuales fueron privadas de la vida misma serían el símbolo que nos uniría a todos alrededor de estos días tristes y devastadores. Podemos tener diferencias y abogar por lo que pensamos, pero no al punto de sacrificar nuestro futuro. Tengo esperanza por mi país y es la esperanza la que quiero que se vea reflejada en la última escena del video”. Juanes