El Gobierno de Nicaragua, liderado por el presidente Daniel Ortega, ha acusado de «terrorismo» a la Universidad Centroamericana (UCA), dirigida por jesuitas, y ha ordenado incautar todos sus bienes materiales tras congelar sus cuentas bancarias.
La acusación, confirmada al medio opositor Divergentes por una fuente judicial y otra ligada a la universidad, no aparece en el sistema judicial, ya que se trata de un oficio, fechado a 15 de agosto, y las autoridades no suelen publicar este tipo de procesos.
El Gobierno nicaragüense ordenó la pasada semana congelar las cuentas bancarias de la UCA y de algunos de sus directivos, según confirmaron fuentes del Ministerio de Gobernación bajo condición de anonimato al citado medio.
La directora para las Américas de Amnistía Internacional, Erika Guevara Rosas, ha asegurado este miércoles en la red social X, anteriormente Twitter, que esta es «otra arremetida contra los Derechos Humanos en el país, ya que la UCA «ha sido un bastión de educación progresista y en defensa del movimiento estudiantil».
La UCA ha estado en el punto de mira del Gobierno de Daniel Ortega, ya que se ha convertido en uno de los bastiones de los manifestantes opositores desde la crisis sociopolítica iniciada en 2018, en la que murieron más de 350 personas, según datos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Managua ha disuelto este año 26 universidades, al retirar la personalidad jurídica de varias de estas instituciones, en lo que se considera una medida represiva de las autoridades, que también han cerrado partidos políticos y organizaciones no gubernamentales./ Europa Press